POR EL AUMENTO DE LAS NAFTA, CRECEN LAS CONSULTAS PARA INSTALAR GNC

0
755

La crisis económica y los constantes incrementos de los combustibles hacen que la opción del gas natural comprimido se vuelve a presentar como una fuerte alternativa para los usuarios.

 

Hoy, la inversión inicial se puede amortizar en más de un año, luego de la colocación.

La utilización del Gas Natural comprimido es algo muy característico del mundo vehicular argentino desde su aparición a fines de 1984.

En poco tiempo tuvo un crecimiento enorme y de hecho, con Argentina a la cabeza Latinoamericana es la segunda región del mundo con más autos impulsados a GNC, solo superada por Asia-Pacífico.

Incluso el ex Secretario de Energía de la Nación, Javier Iguacel, hizo pública su recomendación de la conversación al GNC, al ser mejor para el medio ambiente y amparándose en los proyectos para explotación de gas que se vislumbra en el futuro de la Argentina.

Más allá de esto, el punto que realmente interesa a cualquier usuario en épocas de vacas flacas, en el cual el GNC saca una ventaja que lo hace ser protagonista en nuestro país, es “la billetera”: a principios de siglo, entre todos los sacudones económicos, el parque de autos impulsados a GNC pasó de 600.000 a más de 1 millón en tres años.

Por ejemplo, un tubo convencional de quinta generación de 65 litros ronda los 39 mil pesos. Los tubos se fabrican en Argentina, y los caños son importados.

Hay financiación con tarjeta de crédito y con el Ahora 12, pero también aumentaron los intereses y tasas”.

La gente consulta, pero lo que sucede es que los precios de los equipos están medio altos debido al aumento del dólar, ya que muchos elementos son de afuera.

La nafta, una de las “Vedettes” de la suba de precios, aumentó más de un 70 por ciento en el 2018, un incremento muy superior a la inflación, impactada por la devaluación de este año. El GNC también subió de precios pero no llega a ese porcentaje y sigue siendo un 50% más económico que el combustible líquido.

En este contexto inflacionario, cada vez son más los usuarios que se deciden por el camino de la conversión y realizan la inversión que representa el tubo y su instalación pensando en el ahorro a futuro.

“El gas sigue siendo el combustible más conveniente, Si gastas 5 mil pesos de nafta por mes, con el GNC gastas $2500: en un año y medio lo amortizas al equipo.

Estadísticas del Ente Nacional Regulador de Gas (Diciembre de 2018) informan que en Argentina hay 1.652.939 de vehículos habilitados con GNC, 100.000 más de los que había hace exactamente cinco años.

Para un automóvil moderno, los precios de los equipos de quinta generación parten desde los $39.000 en tubos de 65 litros. Dentro de los costos también hay que tener en cuenta la renovación anual de la oblea, que es obligatoria llevar en el parabrisas.

Hoy en día el costo de la revisión y el tramite ronda los mil pesos. Asimismo, tampoco hay que olvidar la revisión del tubo cada 5 años, con un precio que hoy tiene un promedio de $1.700.

Mientras los vehículos del segmente B, de los más populares en nuestro país, promedian un consumo urbano de 10 litros cada cien kilómetros, que supone un coso de $400 aproximadamente.. Para recorrer la misma distancia a GNC se requiere unos 10 metros cúbicos, que a un costo de poco mas de $22 por m3 implica ceca de $220 para recorrer 100 kilómetros.

Para recuperar la inversión de $40.000 en el caso de un auto con el consumo especificado, se necesitarán recorrer 20.000 kilómetros, que al precio actual de los combustibles líquidos significarían $80.000 de nafta.

Hay que tener en cuenta las desventajas, como la menos autonomía a la hora de realizar trayectos largos y el espacio que se pierde en el baúl de los automóviles en los que el tubo no se puede instalar debajo del piso, lo que es una solución muy practica para los utilitarios.

 

Fuente: EstacionesArgentinas.com